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La creatividad nos ayuda a percibir el mundo de maneras nuevas y diferentes. Nos ayuda a crear obras de belleza, a resolver problemas y a renovar nuestro cuerpo y nuestra mente. Es divertido y, cuando te diviertes, estás teniendo un impacto positivo en tu salud.
Índice
La creatividad mejora la salud mental
Expresarse a través de actividades artísticas y creativas es como una receta para la salud mental. Se ha demostrado en numerosas investigaciones que recurrir a la creatividad alivia tanto el estrés como la ansiedad. La creatividad también ayuda a disminuir la vergüenza, la ira y la depresión que sienten quienes han sufrido un trauma.
El Centro Médico Militar Nacional Walter Reed cuenta con un programa de arteterapia para soldados con trastorno de estrés postraumático. A los veteranos a menudo les resulta difícil expresar verbalmente su trauma. La directora de arteterapia, la Dra. Tammy Shella, ATR-BC, afirma: “A través de la arteterapia, los pacientes pueden expresar cómo se sienten realmente en su interior y revelar cosas que no se sentían cómodos compartiendo con el mundo”.
La creatividad te pone en un estado de flujo
¿Alguna vez has estado tan inmerso escribiendo en tu diario, creando postales con tus fotografías recientes o bailando con tu banda favorita que perdiste la noción del tiempo?
El psicólogo Mihaly Csikszentmihalyi, uno de los cofundadores de la psicología positiva, lo llama “estado de flujo”. Durante este tiempo, estás concentrado con una atención óptima en una tarea o actividad. A veces se lo llama estar en la zona .
Este es un estado excelente y a menudo eufórico. En este estado, estamos más atentos y relajados. Esto nos permite sentirnos más positivos y nos brinda una sensación de logro. Las personas que experimentan el flujo informan niveles más altos de creatividad, productividad y felicidad.
Cómo mejorar tu creatividad
Tal vez no nos consideremos artistas ni innovadores capacitados para generar ideas nuevas y audaces. Sin embargo, los rasgos clave de los innovadores incluyen energía, inteligencia y disciplina, que todos poseemos en diferentes cantidades.
Aunque no seamos artistas ni innovadores de profesión, eso no significa que no podamos encontrar formas de expandir nuestra creatividad. Todos tenemos la capacidad de expresarnos y de idear formas alternativas de ver las cosas.
La buena noticia para quienes no destacamos en el arte durante nuestra infancia es que los efectos beneficiosos se producen durante el proceso artístico, no en el producto final.
Laurel Healy, LCSW, dice: “Participar en un proceso creativo, como cantar, bailar, pintar o dibujar, tiene beneficios para todo el cuerpo. Cuando nos concentramos en algo que es desafiante y/o divertido, creamos nuevas vías neuronales, lo que aumenta la conectividad en el cerebro.
“Una mayor conectividad, especialmente en la corteza prefrontal izquierda del cerebro, nos hace más resilientes emocionalmente de una manera similar a lo que ocurre cuando meditamos. La liberación de dopamina genera una mayor sensación de bienestar y una mayor motivación”, afirma Healy.
Dibujar o pintar
Cada vez hay más investigaciones que demuestran que actividades como dibujar y pintar pueden aliviar el estrés y la depresión. Se ha demostrado que las actividades artísticas mejoran la memoria y la resiliencia en los adultos mayores, e incluso ayudan a los adultos mayores con demencia a reconectarse con el mundo. También se ha demostrado que hacer arte de forma activa en lugar de simplemente apreciarlo previene el deterioro cognitivo.
Cantar o tocar música
La música nos une. Según los investigadores, cuando armonizamos o sincronizamos con otras personas, tenemos sentimientos más positivos hacia ellas. Esto ocurre incluso si no están en la misma habitación.
Cantar aumenta los niveles de oxitocina tanto en cantantes aficionados como profesionales. Si no te apasiona cantar, ¿te gusta simplemente escuchar música? El simple hecho de escuchar música libera oxitocina. La música afecta directamente a los niveles de oxitocina y la oxitocina afecta a nuestra capacidad de confiar y conectarnos socialmente con los demás.
Bailar
Bailar no solo es divertido, sino que también es muy bueno para la salud. Los estudios han demostrado que bailar alivia la ansiedad, mejora la calidad de vida de las pacientes con cáncer de mama y reduce el riesgo de demencia en las personas mayores.
Lo sorprendente de la investigación es que el beneficio no se debió únicamente al ejercicio físico. En comparación con otras formas de ejercicio, el baile fue el único ejercicio que marcó una diferencia.
Jugar
Aunque jugar o contar historias puedan parecer una actividad momentánea, existen beneficios psicológicos y de desarrollo que se acumulan y son duraderos.
Jennifer A. Perry, ex vicepresidenta de publicaciones mundiales de Sesame Workshop y directora ejecutiva de Perry Educational Projects Consulting, señala los beneficios a largo plazo del juego y las actividades creativas.
Ella dice: “Al explorar la imaginación y la creatividad a través del arte, la narración de cuentos, los juegos interactivos, la música y todo tipo de juegos, los niños aprenden habilidades para toda la vida… cómo expresarse, comunicarse con otros, resolver problemas, desarrollar la confianza en sí mismos, apreciar diversas ideas y culturas y encontrar cosas que los hagan sentir realizados y felices”.
El juego no es sólo cosa de niños. También es beneficioso para los adultos. El Instituto Nacional del Juego destaca la investigación que ya existe sobre el juego: “Una enorme cantidad de investigación científica existente, desde la neurofisiología, la psicología cognitiva y del desarrollo hasta el comportamiento del juego animal y la biología molecular y evolutiva, contiene datos valiosos sobre el juego. La investigación existente describe patrones y estados de juego y explica cómo el juego moldea nuestro cerebro, crea nuestras competencias y lastra nuestras emociones”.
Pasar tiempo en la naturaleza
Un estudio titulado “Creatividad en la naturaleza: Mejorar el razonamiento creativo a través de la inmersión en entornos naturales” mostró cómo la naturaleza afecta la creatividad. Un grupo de excursionistas que pasó cuatro días inmersos en la naturaleza y desconectados de los dispositivos tecnológicos aumentó su rendimiento en una tarea de creatividad/resolución de problemas en un 50%.
En este estudio, la naturaleza proporcionó estímulos emocionalmente positivos. Al reducir el uso de teléfonos y computadoras, los participantes del estudio no cambiaban de tarea ni realizaban varias tareas a la vez, no prestaban atención a eventos repentinos, no mantenían los objetivos de las tareas ni inhibían acciones irrelevantes. Por lo tanto, pasar tiempo de calidad en la naturaleza mejoró sus puntajes en las pruebas de creatividad.
Así que, cuando los problemas te abrumen, aléjate de la computadora. Te ayudará pensar creativamente en soluciones y opciones alternativas mientras caminas por el jardín o haces senderismo en el parque.
Una palabra de Verywell
La cotidianidad de nuestra vida diaria puede hacer que todo parezca monótono o mundano. El resultado es una monotonía abrumadora o una sensación de estar en una rueda de hámster sin fin.
La creatividad inspira ideas y pensamientos novedosos. Así que, aléjate de la rutina y disfruta de actividades lúdicas y divertidas. Crear arte, cantar, bailar y jugar no solo te hará sentir bien, sino que también te renovará y revitalizará.