Cerrar este reproductor de vídeo
Índice
Puntos clave
- Las investigaciones en torno al hábito de escuchar música antes de acostarse han sido mixtas.
- Un nuevo estudio sugiere que escuchar música alegre o triste antes de acostarse puede mejorar la calidad del sueño.
- La música relajante se ha relacionado con una disminución de la frecuencia cardíaca y la presión arterial, mientras que la música rápida y fuerte puede tener el efecto opuesto, según los expertos.
Todos tenemos nuestras rutinas para la hora de dormir . Según la persona, estas pueden incluir un régimen de cuidado de la piel, terminar un capítulo de un libro, preparar una taza de té o mirar nuestro programa de televisión favorito. La mayoría de estos hábitos nos ayudan a relajarnos al final del día y, con suerte, a tener un buen sueño nocturno.
Sin embargo, hay un hábito a la hora de acostarse que ha resultado controvertido: escuchar música. Las investigaciones anteriores que han explorado la música que se escucha antes de acostarse han estado divididas. Algunos estudios han demostrado que la música clásica relajante reduce los problemas de sueño, mientras que otros han demostrado que las personas que escuchan música con frecuencia antes de acostarse sufren una peor calidad de sueño.
Frecuencias variadas a la hora de dormir
Los investigadores pidieron a 62 participantes, de entre 19 y 32 años, que se concentraran en tres tipos de música antes de acostarse: música alegre, música triste o ruido rosa, que consiste en sonidos a una frecuencia que filtra las distracciones.
Cada participante pasó cinco noches consecutivas escuchando el audio asignado antes de acostarse (dos noches sin música entre cada condición). Luego, los participantes informaron sobre su calidad de sueño.
Autores del estudio
Escuchar música es relativamente barato y fácil de implementar; tanto los profesionales de la salud como los particulares pueden utilizar la escucha de música como una intervención rentable y conveniente.
Los resultados revelaron que los participantes experimentaron una mejor calidad de sueño después de escuchar música alegre o triste en comparación con el ruido rosa. Sin embargo, no se observaron diferencias significativas en la calidad del sueño entre escuchar música alegre o triste. Los beneficios también continuaron, ya que los participantes también informaron una reducción del estrés y una mayor satisfacción con la vida al día siguiente.
“Escuchar música es relativamente barato y fácil de implementar; tanto los profesionales de la salud como los particulares pueden utilizar la escucha de música como una intervención rentable y conveniente para mejorar la calidad subjetiva del sueño y otros resultados de bienestar diario”, escribieron los autores del estudio.
Es importante señalar que el estudio no estuvo exento de limitaciones. Como los resultados fueron informados por los propios participantes, existe un gran riesgo de subjetividad y variabilidad. Al mismo tiempo, los investigadores no midieron la familiaridad de los participantes con la música, lo que podría afectar su impacto.
La música y la mente
El psiquiatra Alex Dimitriu, MD , que se especializa en medicina del sueño, señala que la música es una herramienta emocional bastante poderosa. Esto significa que también puede ser una distracción eficaz para los pensamientos acelerados mientras se intenta conciliar el sueño. Los estudios han demostrado que escuchar música antes de acostarse puede fomentar la tranquilidad física y mental necesaria para lograr una buena noche de sueño.
Dr. Alex Dimitriu
La música puede generar sentimientos, incluida la relajación, y también reducir la divagación mental que suele observarse en personas ansiosas o estresadas.
“La música puede provocar sentimientos, incluida la relajación, y también reducir la divagación mental que suele presentarse en personas ansiosas o estresadas”, afirma.
La música también puede tener un impacto físico real. Las investigaciones que exploran el efecto de la música en el cuerpo han demostrado que la música relajante puede reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Al mismo tiempo, Dimitriu señala que, dado que la música rápida, fuerte o intensa podría tener el efecto opuesto y aumentar la frecuencia cardíaca, se debe evitar antes de acostarse.
“Haz un balance entre lo que te gusta y asegúrate de que la música te hace sentir bien”, dice Dimitriu. “De nuevo, este efecto debería ser sutil. El sueño es un proceso natural que se produce mejor en una habitación fresca, oscura y tranquila”.
Qué significa esto para usted
Escuchar música que te haga sentir feliz y tranquilo antes de acostarte puede mejorar la calidad de tu sueño. Crear una lista de reproducción dedicada exclusivamente a la música para dormir puede ser un método eficaz para minimizar los problemas que puedas tener al conciliar el sueño.