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Sean Anthony Eddy / Imágenes Getty
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Disgrafía, también conocida como trastorno de la expresión escrita, es un tipo de trastorno del aprendizaje . Puede dificultar que la persona escriba tan bien como otras personas de su edad y nivel educativo. Es una afección neurológica que puede afectar la capacidad de la persona para escribir letras y números.
Escribir es una tarea compleja que involucra muchas partes del cerebro . La disgrafía tiende a ser una frase general para cualquier problema relacionado con la escritura. De hecho, una persona con disgrafía puede tener dificultades con varias tareas y habilidades, entre ellas la caligrafía, la ortografía, la gramática, la puntuación, la composición de párrafos, la lectura y las matemáticas.
Este artículo analiza los tipos, síntomas, causas y tratamiento de la disgrafía.
Índice
Tipos de disgrafía
Estos son los dos tipos de disgrafía:
- Disgrafía del desarrollo: esta forma de disgrafía afecta a los niños y suele identificarse cuando comienzan a aprender a escribir en la escuela. La disgrafía puede afectar la capacidad de aprendizaje del niño , a pesar de la exposición a una educación e instrucción adecuadas. Se estima que entre el 7% y el 15% de los niños en edad escolar presentan algún tipo de dificultad con la escritura.
- Disgrafía adquirida: esta forma de disgrafía afecta a personas que han sufrido algún tipo de daño neurológico. Como resultado, pueden empezar a tener dificultades para escribir, incluso si son adultos instruidos y alguna vez pudieron escribir con facilidad.
Síntomas de la disgrafía
Alguien con disgrafía puede tener dificultades con las siguientes tareas:
- Formación de letras
- Tamaño de las letras
- Espaciado entre letras
- Ortografía
- Gramática
- Composición
- Velocidad de escritura
- Legibilidad de la escritura a mano
- Habilidades motoras finas y coordinación
Como resultado, la persona puede presentar los siguientes síntomas:
- Velocidad de escritura lenta
- Dificultad para sostener y maniobrar un instrumento de escritura.
- Incapacidad de escribir en línea recta
- Tendencia a escribir palabras al revés
- Dificultad para recordar cómo se forman las letras.
- Uso incorrecto de letras mayúsculas y minúsculas
- Uso incorrecto de verbos y pronombres
- Dificultad para escribir oraciones con gramática y puntuación correctas.
- Tendencia a reordenar u omitir palabras de las oraciones.
Los efectos más amplios de la disgrafía
Un estudio de 2018 señala que la disgrafía puede tener efectos perjudiciales más amplios. Por ejemplo, las personas que tienen dificultades para escribir pueden experimentar frustración extrema, angustia, baja autoestima y dificultad para socializar.
El estudio señala que los niños con disgrafía pueden aprender y absorber menos información si toda su atención se centra en intentar escribir correctamente. Los adultos pueden enfrentarse a limitaciones en la elección de carreras y en el avance profesional, ya que muchas tareas cotidianas requieren habilidades de escritura.
Causas de la disgrafía
Las causas de la disgrafía pueden variar según el tipo de afección:
- Disgrafía del desarrollo: La disgrafía del desarrollo suele ser genética y tiende a ser hereditaria.1 lo tanto, es más probable que un niño la padezca si un pariente biológico la padece.
- Disgrafía adquirida: En este tipo de disgrafía, las habilidades adquiridas se pierden debido a un daño en el lóbulo parietal del cerebro, lo que podría ocurrir debido a una lesión cerebral, una condición neurológica o una condición degenerativa.
Diagnóstico de la disgrafía
El manual de diagnóstico de salud mental, conocido como Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, quinta edición (DSM-5-TR) , incluye la disgrafía en la categoría de trastorno específico del aprendizaje. Sin embargo, no la define como una afección de salud independiente con su propio conjunto de síntomas, lo que puede dificultar su diagnóstico.
Si bien no existen pruebas médicas que puedan ayudar a diagnosticar la disgrafía, el proceso de diagnóstico implica otras pruebas y evaluaciones, como:
- Evaluación de la escritura a mano: Las pruebas de escritura a mano formalizadas pueden ayudar a evaluar la legibilidad y la velocidad de la escritura a mano de la persona.
- Prueba VMI: La prueba de desarrollo de integración visomotora de Beery (VMI) puede ayudar a evaluar la capacidad de la persona para integrar sus habilidades visuales y motoras.
- Evaluación educativa: Los proveedores de atención médica colaboran con especialistas en educación para determinar el historial educativo de la persona, sus fortalezas y debilidades de aprendizaje y el alcance de sus dificultades de escritura.
Es importante tener en cuenta que la disgrafía suele ir acompañada de otros trastornos y afecciones del aprendizaje, como el trastorno de la lectura, el trastorno del lenguaje expresivo, el trastorno del desarrollo de la coordinación y el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) .
Manejo de la disgrafía
Si bien no existen medicamentos ni procedimientos que puedan tratar la disgrafía, la disgrafía del desarrollo se puede controlar con intervenciones educativas que pueden variar según el grado de deterioro que enfrenta el niño:
- Alojamiento: El niño participa en la educación regular con recursos de asistencia o apoyo, pero sin cambiar el contenido del currículo.
- Modificación: El currículo y los objetivos de aprendizaje del niño se modifican según sus capacidades. La escuela también les proporciona servicios especiales. Por ejemplo, se les puede permitir responder a sus exámenes de forma oral en lugar de hacerlo por escrito.
- Remediación: La escuela del niño ofrece intervenciones específicas para ayudarlo a afrontar la gravedad de su disgrafía.
Si bien todos los niños tienen dificultades ocasionales con la escritura y las tareas relacionadas con el aprendizaje, los síntomas de la disgrafía se vuelven más evidentes a medida que aumentan las tareas relacionadas con la escritura. Si sospecha que su hijo puede tener disgrafía o un trastorno del aprendizaje, busque ayuda lo antes posible. Es importante trabajar con sus proveedores de atención médica y educadores para ayudarlo a sobrellevar la situación.
Una palabra de Verywell
La disgrafía es una discapacidad de aprendizaje con la que puede resultar difícil vivir. Si usted o un ser querido padecen disgrafía, es posible que note que, además de dificultar la escritura, también puede resultar profundamente frustrante y desmotivador. Puede resultar útil consultar a un profesional de la salud mental para afrontar los efectos angustiantes de la afección y mejorar la confianza en uno mismo .