Cerrar este reproductor de vídeo
La fuga de ideas es un síntoma que implica un habla rápida y errática que cambia rápidamente de pensamientos e ideas. Las personas que experimentan este síntoma hablan rápidamente y saltan de un tema a otro.
Si bien el trastorno bipolar generalmente se considera un trastorno del estado de ánimo, los síntomas también pueden incluir trastornos del pensamiento, en particular durante los episodios maníacos. Las personas en estado maníaco pueden tener dificultad para filtrar la información significativa de la que no lo es y, por lo tanto, pueden responder a su entorno de maneras sorprendentes.
Cuando esto sucede, la información sensorial ordinaria, como el sonido del tráfico o las luces intermitentes, puede resultar muy distractora. Como resultado, las personas que experimentan manía centran su atención en información no esencial.
Durante los episodios maníacos, no es raro que las personas bipolares experimenten ” pensamientos acelerados ” y “fuga de ideas”. Estos dos síntomas asociados implican procesos de pensamiento extremadamente rápidos que a veces saltan de un tema a otro a una velocidad increíble.
Los pensamientos acelerados y la fuga de ideas también son síntomas comunes de TDAH .
Índice
Causas de la fuga de ideas
La fuga de ideas no es una afección, sino un síntoma de la manía bipolar. La manía es un período de estado de ánimo excesivamente exaltado que provoca cambios extremos de humor, así como un aumento significativo de la conducta y de los niveles de energía. Es un síntoma característico del trastorno bipolar.
Otros factores que pueden influir en la fuga de ideas incluyen:
- Psicosis , que puede presentarse con trastorno bipolar, esquizofrenia o afecciones neurológicas, incluidas la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Alzheimer.
- Esquizofrenia
- Sustancias como la marihuana, que pueden provocar psicosis y empeorar el curso de la esquizofrenia
Otros tipos de trastornos del pensamiento
Además de la fuga de ideas, en el trastorno bipolar y en otras afecciones pueden presentarse
otros tipos de trastornos del pensamiento . Algunos de ellos son:
- Pensamiento tangencial : implica tener pensamientos conectados pero alejarse mucho del tema original y nunca regresar a la idea o punto original.
- Pensamientos acelerados : estos pensamientos ocurren rápidamente, parecen incontrolables y son muy distractores. Este síntoma puede presentarse en el trastorno bipolar y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) , la ansiedad y el trastorno obsesivo-compulsivo.
- Bloqueo del pensamiento : este síntoma implica una interrupción repentina del habla porque la persona olvida lo que estaba diciendo, como si la idea hubiera sido bloqueada o eliminada de su mente.
- Pensamiento suelto : este tipo de pensamiento implica tener pensamientos que no están conectados y no siguen una línea lógica de pensamiento.
- Pensamiento circunstancial : en este tipo de trastorno del pensamiento, las personas seguirán una serie de ideas conectadas, alejándose mucho del tema original antes de regresar finalmente a la idea original.
Tratamiento
No existe un tratamiento específico para la fuga de ideas, pero tratar la afección subyacente puede ayudar a aliviar este síntoma. El tratamiento que puede ayudar depende de la afección que se le haya diagnosticado a la persona.
Los pensamientos acelerados y las fugas de ideas pueden ser relativamente leves o bastante graves. Cuando los síntomas son leves, es posible utilizar técnicas sencillas para calmarse, como:
- Meditación : La meditación es una técnica comprobada para calmarse a sí mismo.
- Ejercicios de respiración profunda : el acto físico de respirar profundamente a menudo puede calmar tanto la mente como el cuerpo.
- Visualización guiada : Hay cintas disponibles para ayudar a reorientar los pensamientos acelerados hacia pensamientos más tranquilos.
- Distracción : mirar televisión o distraer de alguna otra manera la mente de los pensamientos acelerados.
- Sueño adecuado : existe una conexión importante entre el sueño y la salud mental.
- Manejo del estrés : Reducir el estrés y utilizar estrategias de afrontamiento pueden resultar útiles
- Comprender los factores desencadenantes : reconocerlos puede ayudar a las personas a evitarlos o gestionarlos de forma más eficaz.
Sin embargo, cuando los síntomas son muy graves, la persona que experimenta pensamientos acelerados y fugas de ideas no podrá detenerse y concentrarse en dichos ejercicios. En tales casos, es una buena idea consultar a un médico que pueda proporcionar medicamentos para reducir la ansiedad y/o ayudar a controlar un episodio maníaco.
Los tratamientos para la manía o la psicosis pueden incluir:
- Los medicamentos incluyen estabilizadores del estado de ánimo, antipsicóticos, ansiolíticos, antidepresivos o medicamentos para dormir.
- Psicoterapia, incluida la terapia cognitivo conductual (TCC), la terapia dialéctica conductual (TDC) y la terapia de grupo.
- Terapia electroconvulsiva
- Grupos de apoyo