Cerrar este reproductor de vídeo
La memoria asociativa se refiere a la capacidad de recordar relaciones entre conceptos, y no sólo los conceptos individuales en sí.
En los seres humanos, esto se relaciona con la información visual y verbal, como recordar cómo se relacionan dos palabras (por ejemplo, hombre – mujer) o ver un objeto y su nombre alternativo (por ejemplo, una guitarra). Se cree que la memoria asociativa está mediada por el lóbulo temporal medial del cerebro.
Índice
Historia de la memoria asociativa
La memoria asociativa se ha estudiado durante más de un siglo. Los primeros escritos de George H. Lewes describieron el fenómeno como “la ley de asociación” en 1885. William James fue el primero en nombrar el concepto de memoria asociativa y sus estudios de 1890 investigaron formalmente el fenómeno.
Los estudios sobre la memoria asociativa continuaron durante los años 1940 y 1950, y la primera revisión moderna se realizó en 1956 a cargo de Atkinson y Shiffrin. La revisión reconoció dos tipos de memoria asociativa: la especificidad de codificación y la fuerza de recuperación. Estas ideas fueron desarrolladas más a fondo por Endel Tulving y Daniel Schacter en 1990, quienes introdujeron una distinción entre memoria explícita e implícita.
La comprensión moderna de la memoria asociativa está guiada por las teorías de la neurociencia cognitiva, incluidas las de David C. Rubin y Robert A. Bjork, quienes compilaron su investigación en la teoría de doble traza de la memoria explícita en 1975.
La hipótesis de recencia de Tulving se cita con frecuencia en apoyo de la memoria asociativa implícita, que establece que cuando se da una lista para estudiar con un breve retraso entre cada palabra, es más probable recordar las palabras del final de la lista que las del principio.
Tipos de memoria asociativa
Existen dos tipos principales de memoria asociativa: implícita y explícita . La memoria asociativa implícita es un proceso inconsciente que se basa en la preparación , mientras que la memoria asociativa explícita implica el recuerdo consciente .
Memoria asociativa implícita
Los procesos fisiológicos que se ven afectados por la memoria implícita incluyen los siguientes: rendimiento, nivel de excitación, tiempo de reacción, habituación y velocidad de procesamiento talámico (en el cerebro).
Una de las pruebas más utilizadas para la memoria asociativa implícita es el priming, desarrollado por Kutas y Hillyard en 1980.4 priming se utiliza para probar si una palabra o imagen influye en cómo el sujeto responde a otro estímulo, indicando así que ya se ha encontrado con esa palabra o imagen anteriormente.
Un ejemplo de preparación es cuando a una persona se le muestra una imagen de un automóvil y luego se le pide que identifique una segunda imagen relacionada de alguna manera (por ejemplo, otro automóvil). Si puede identificar la coincidencia correcta más rápido que si nunca hubiera visto la primera imagen, entonces se considera evidencia de que la primera imagen preparó a la persona para reconocer la segunda.
Memoria asociativa explícita
La memoria asociativa explícita se basa en el recuerdo consciente de información o eventos. Existen dos tipos de memoria asociativa explícita: episódica y semántica. Los recuerdos episódicos son el recuerdo de experiencias personales específicas, como un aniversario de bodas, mientras que los recuerdos semánticos se refieren a hechos sobre el mundo, como saber que París está en Francia.
Cómo mejorar la memoria asociativa
Para mejorar la memoria asociativa, puedes practicar la recuperación de asociaciones, lo que ayuda a fortalecer las conexiones sinápticas en el cerebro y mejora su capacidad de activarse más rápidamente.
A continuación se presentan algunas formas de practicar la recuperación de asociaciones.
1. Crea una red de asociaciones. Esto significa asociarte con personas que puedan recordar muchas cosas (o que digan que son buenas recordando cosas). Al observarlas y imitar sus acciones, puedes mejorar tu propia capacidad para recordar elementos mediante el sobreaprendizaje.
2. Asociar una persona o cosa con otra de alguna manera, como por ejemplo mediante una rima, una oración o una frase. La asociación puede ser general (por ejemplo, “la hierba es verde”) o específica (por ejemplo, “el médico está en la casa”).
3. Crea una historia con muchas asociaciones para que sea más fácil de recordar y te ayude a recordar detalles. Si tienes problemas para recordar información, entonces practica recordarla una y otra vez y toma nota de dónde tienes problemas.
4. Practique la memorización de elementos de una lista serial creando asociaciones con elementos que se encuentran al principio de la lista (en lugar de retener estos elementos en la memoria de corto plazo). El objetivo es hacer que sea más fácil recordar el primer elemento, lo que le ayudará a recordar el resto de los elementos.
5. Utilice el método de los lugares para recordar listas u otros materiales asociándolos con lugares que le resulten familiares (por ejemplo, habitaciones de su casa). Esto está relacionado con las técnicas de codificación espacial que utilizan los pilotos para recordar rutas y procedimientos de vuelo, y funciona mejor si crea una imagen visual de cada lugar.
6. Use imágenes para recordar una lista, un evento u otros materiales creando imágenes mentales y/o usando accesorios (por ejemplo, si está recordando los artículos de su lista de compras, imagínelos en su mente cuando esté en la tienda).
7. Crea asociaciones que muestren en qué se parecen o se diferencian las cosas entre sí. Por ejemplo, si quieres recordar los pasos de un proceso, asócialos de alguna manera para que tengan sentido para ti (por ejemplo, “sacar” es similar a “salir de”).
8. Utilice dispositivos que estimulen la memoria (por ejemplo, pistas ), que son elementos o acciones que estimulan el recuerdo de información que es fácil de olvidar . Puede utilizar un dispositivo que estimule la memoria vinculándolo a cualquier cosa que desee recordar, como poner una alarma o escribir la información.
9. Asocie personas con palabras (o situaciones) de alguna manera y luego intente recordar el nombre de la persona recordando la palabra (por ejemplo, la palabra “verde” podría desencadenar el nombre de su amiga, “Jenny”).
10. Utiliza el método que mejor se adapte a ti. Cada persona es diferente y a algunas personas les resulta más fácil crear música o frases que les ayuden a recordar cosas.
Impacto de la memoria asociativa
El valor de desarrollar capacidades de memoria asociativa tiene implicaciones de largo alcance para su vida diaria.
Establecer asociaciones le ayudará a recordar información con mayor facilidad, como nombres de personas y lugares, números de teléfono, cumpleaños y aniversarios. Esto puede ayudarle a recordar otra información relacionada con ellos (por ejemplo, el cumpleaños de alguien podría recordarle que esa persona tiene una fiesta planeada para esa noche).
También te ayuda a recordar cosas de manera eficiente al recordar información que es útil para tareas específicas. Por ejemplo, puedes formar asociaciones entre las cosas que necesitas hacer y las personas que pueden ayudarte a lograrlas.
Las técnicas de formación de asociaciones también son útiles para recordar información en exámenes o en otras situaciones de prueba (por ejemplo, un examen de conducir).
Los peligros de la memoria asociativa
La memoria asociativa no siempre es una ciencia perfecta. A continuación, se presentan algunas formas en las que la memoria asociativa puede conectarse de maneras que no desea cuando le viene a la mente un mal recuerdo o se crea una asociación aleatoria.
- Asocias a tu maestra de jardín de infantes con un mono porque tenía uno en su escritorio.
- Un olor evoca un acontecimiento, como el pastel de manzana que preparaba tu madre cuando estabas enfermo.
- Tu película o programa de televisión favorito te recuerda a alguien que aparece en él y de inmediato te hace pensar en esa persona de una manera nueva (en un contexto diferente).
- El acosador escolar saca a relucir el recuerdo de un acontecimiento embarazoso que tuviste cuando estabas cerca de esa persona.
- Una canción te recuerda tu primer beso o algún otro evento memorable en tu vida y al hacerlo te hace más difícil sacar “esa” canción de tu cabeza.
Una palabra de Verywell
La memoria asociativa es importante en la vida diaria. Aprovechar esta capacidad de manera eficaz puede ser una gran ayuda para el éxito. Si tienes problemas con la memoria asociativa, existen muchas técnicas que puedes utilizar para mejorarla. Algunas de ellas incluyen el uso de recursos mnemotécnicos, visualización y estrategias de formación de asociaciones (como vincular cosas entre sí).
De esta manera, podrás recordar los recuerdos con mayor facilidad. Recuerda, sobre todo, que la memoria asociativa se puede mejorar con la práctica.