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La resiliencia se refiere a la capacidad de afrontar y recuperarse de las dificultades de la vida. Puede marcar la diferencia entre manejar la presión y perder la calma. Las personas resilientes tienden a mantener una actitud más positiva y a afrontar el estrés de manera más eficaz.
Las investigaciones han demostrado que, si bien algunas personas parecen desarrollar resiliencia de forma natural, estos comportamientos también se pueden aprender. Ya sea que estés atravesando un momento difícil ahora o quieras estar preparado para desafíos futuros, puedes desarrollar resiliencia de las siguientes maneras:
- Encontrar un propósito
- Creer en ti mismo
- Desarrollando una red social
- Abrazando el cambio
- Ser optimista
- Cuidándote a ti mismo
- Desarrollar habilidades para resolver problemas
- Establecer metas
- Tomando acción
- Comprometerse a desarrollar habilidades a lo largo del tiempo
Índice
Encuentra un sentido de propósito
Encontrar un sentido de propósito puede ayudarte a encontrarle sentido a los desafíos de la vida. En lugar de desanimarte por tus problemas, con un propósito definido estarás más motivado a aprender de las experiencias pasadas y seguir adelante.
Algunos ejemplos de propósitos incluyen:
- Construyendo un sistema de apoyo de seres queridos
- Dando voz a un movimiento social
- Llevar un estilo de vida saludable
- Aprendiendo sobre diferentes culturas
- Hacer arte o música
- Al servicio de su comunidad
Ante una situación emocional difícil (como la muerte de un ser querido o el fin de una relación ), encontrar un propósito puede ser especialmente importante para la recuperación. Esto puede implicar involucrarse en la comunidad, cultivar la espiritualidad o participar en actividades que sean significativas para usted.
Cree en tus habilidades
Tener confianza en la propia capacidad para afrontar las tensiones de la vida puede desempeñar un papel importante en la resiliencia. Tener más confianza en las propias capacidades, incluida la capacidad para responder y afrontar una crisis , es una excelente manera de desarrollar resiliencia para el futuro.
Escucha los comentarios negativos que tengas en tu cabeza . Cuando los oigas, practica reemplazarlos inmediatamente por otros positivos, como: “Puedo hacer esto”, “Soy una gran amiga/madre/pareja” o “Soy buena en mi trabajo”.
Las investigaciones han demostrado que la autoestima desempeña un papel importante a la hora de afrontar el estrés y recuperarse de acontecimientos difíciles. Recuerde sus fortalezas y logros.
Desarrollar una red social fuerte
Es importante contar con personas en las que puedas confiar . Tener a tu alrededor personas solidarias y comprensivas actúa como un factor de protección durante los momentos de crisis. Si bien hablar de una situación con un amigo o un ser querido no hará que tus problemas desaparezcan, te permitirá compartir tus sentimientos, obtener apoyo, recibir comentarios positivos y pensar en posibles soluciones a tus problemas.
Abrazar el cambio
La flexibilidad es una parte esencial de la resiliencia. Si aprende a ser más adaptable, estará mejor preparado para responder cuando se enfrente a una crisis vital. Las personas resilientes suelen aprovechar estos acontecimientos como una oportunidad para emprender nuevas rutas. Si bien algunas personas pueden verse aplastadas por los cambios abruptos, las personas muy resilientes son capaces de adaptarse y prosperar.
Sea optimista
Mantenerse optimista durante los períodos oscuros puede ser difícil, pero mantener una perspectiva esperanzada es una parte importante de la resiliencia. Lo que estás afrontando puede ser difícil, pero es importante mantener la esperanza y la actitud positiva respecto de un futuro mejor.
Pensar positivamente no significa ignorar el problema para centrarse en los resultados positivos. Significa comprender que los contratiempos son temporales y que usted tiene las habilidades y capacidades para combatir los desafíos que enfrenta.
Cuídate a ti mismo
Cuando estás estresado, es muy fácil descuidar tus propias necesidades. Perder el apetito, ignorar el ejercicio y no dormir lo suficiente son reacciones comunes ante una situación de crisis. En cambio, concéntrate en desarrollar tus habilidades de autocuidado, incluso cuando estés preocupado. Reserva tiempo para actividades que disfrutes.
Al cuidar de sus propias necesidades, puede mejorar su salud general y su resiliencia y estar completamente preparado para enfrentar los desafíos de la vida.
Desarrollar habilidades para resolver problemas
Las investigaciones sugieren que las personas que pueden encontrar soluciones a un problema tienden a lidiar de manera más productiva con el estrés en comparación con aquellos que no pueden encontrar soluciones a los problemas. Siempre que se enfrente a un nuevo desafío, haga una lista rápida de algunas de las posibles formas en que podría resolver el problema.
Experimente con diferentes estrategias y concéntrese en desarrollar una forma lógica de resolver problemas comunes. Si practica sus habilidades de resolución de problemas de manera regular, estará mejor preparado para enfrentar un desafío serio.
Establecer metas
Las situaciones de crisis son abrumadoras, pueden parecer incluso insuperables. Las personas resilientes son capaces de ver estas situaciones de forma realista y establecer objetivos razonables para afrontar el problema.
Cuando una situación te abrume, da un paso atrás y evalúa lo que tienes delante. Piensa en posibles soluciones y luego divídelas en pasos manejables.
Tomar medidas
Esperar a que un problema desaparezca por sí solo solo prolonga la crisis. En lugar de eso, comience a trabajar para resolver el problema de inmediato. Si bien es posible que no haya una solución rápida o sencilla, puede tomar medidas para mejorar su situación y hacerla menos estresante.
Concéntrese en el progreso que ha logrado hasta ahora y planifique los próximos pasos, en lugar de desanimarse por la cantidad de trabajo que aún queda por hacer.
Trabajar activamente para encontrar soluciones también te ayudará a sentir que tienes más control. En lugar de simplemente esperar a que las cosas sucedan, ser proactivo te permite ayudar a que tus objetivos se hagan realidad.
Sigue trabajando en tus habilidades
Puede llevar tiempo desarrollar resiliencia, así que no te desanimes si aún tienes dificultades para afrontar situaciones problemáticas. Todos pueden aprender a ser resilientes y no implica ningún conjunto específico de comportamientos o acciones. La resiliencia puede variar drásticamente de una persona a otra.
Concéntrese en practicar estas habilidades, así como las características comunes de las personas resilientes, pero recuerde también desarrollar sus fortalezas existentes.